7 nov 2008
Carnivorous Plants and the Bloody-Fingered People Who Love Them
Aunque el despertador sonará dentro de dos dias te invade una sensacion de lunes por la mañana en el momento en el que te percatas de que la mezcla de calor corporal y frio se encuentra en la proporción exacta para pasar una semana más en la cama.
Se te antoja tan imposible la existencia de vida fuera de ella como la vida de peces de acuario en lava.
Y te levantas,
en un acto reflejo impulsado por algún "porquetienesquehacerlo" vacío.
Voz lejana de otra orden más que pierde el control sobre esa vida que creía suya,
que obedecía sus deseos porque aún los suyos estaban roncos y no podían ordenar silencio a toda voz que sonara por la megafonía.
Y maldices tan fuerte que te oyen desde casa.
Porque en esta ciudad solo llueve.
Y te quedas dormido en la guagua soñando que algún dia nos iremos al campo y montaremos una fábrica de chocoflakes.
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